EL EJERCICIO REGULAR ES BUENO PARA LA SALUD Y EL CONTROL DEL ASMA

Establecer una rutina de ejercicio regular tiene muchos beneficios para la salud, especialmente para los que viven con asma. Jari Parkkari, profesor de Medicina del Deporte y del Ejercicio, comparte sus consejos para hacer más ejercicio y potenciar la salud pulmonar.

Si se pregunta desde una perspectiva científica, los beneficios de hacer ejercicio con regularidad son innegables.

La actividad física moderada no sólo reduce el dolor y disminuye el nivel de azúcar en la sangre, sino que el ejercicio regular también puede mejorar el control del asma y reducir la falta de aliento. Según un estudio realizado en Canadá, hubo mejoras significativas en la aptitud aeróbica entre los participantes con asma que siguieron un programa de ejercicio de 12 semanas, junto con mejoras en su calidad de vida y una reducción en el uso de medicamentos de rescate para el asma.

"Sabemos que una buena condición física aeróbica mejora el control del asma", confirma Jari Parkkari, profesor de Medicina del Deporte y del Ejercicio de la Universidad de Jyväskylä (Finlandia).

 De hecho, el ejercicio se considera una parte importante del control del asma. Pero, ¿cuánto ejercicio puede marcar la diferencia?

 "Tenemos recomendaciones internacionales de actividad física que indican que los adultos deben realizar entre 2,5 y 3 horas de actividad física ligera y moderada a la semana", dice Parkkari. "Esto también es válido para los asmáticos. Y éste es el extremo inferior de la escala".

Cada paso cuenta: cómo hacer actividad física a lo largo del día

La actividad física diaria puede adoptar la forma de entrenamientos planificados o de incrementos más pequeños a lo largo del día, una técnica que Parkkari denomina "tentempié".

 "La actividad física puede adoptar diversas formas, como hacer el trayecto al trabajo o a las tiendas a pie o en bicicleta. O en una época como la actual, en la que muchos trabajan desde casa, hacer descansos regulares donde ejercitarse puede ayudar, ya que el tiempo sedentario es un factor de riesgo independiente para los problemas de salud", afirma Parkkari.

 Los efectos se acumulan a lo largo del día, dice, y pueden ser similares a los que se consiguen con entrenamientos más concentrados. Aun así, hay varias posibilidades de añadir actividad aeróbica a tu día. Para quienes tengan sobrepeso o luchen con problemas musculoesqueléticos que les causen dolor, utilizar una bicicleta estática en interiores o nadar es una buena forma de añadir ejercicio sin tener que cargar con su propio peso. Ser más activo de esta manera también puede añadir otros beneficios, como una presión arterial más baja y menos dolor.

Mantener el calor cuando se está en el frío

Para los que prefieren estar al aire libre durante todo el año, caminar, esquiar o practicar la marcha nórdica son actividades en las que incluso los principiantes pueden participar, incluso en invierno. Según Parkkari, el aire frío puede resecar las vías respiratorias y desencadenar su constricción. Recomienda cubrir las vías respiratorias, quizás con una mascarilla o una bufanda caliente para proteger la boca mientras se respira, para calentar el aire inhalado y mantener a raya la constricción. Del mismo modo, un protector bucal puede ayudar durante otras estaciones si sus vías respiratorias son muy reactivas y las alergias al polen pueden ser un factor desencadenante.

Lo importante de añadir ejercicio a su rutina es que hable con su médico y siga manteniendo su plan de tratamiento. Si le han recetado un inhalador, Parkkari recomienda llevar el dispositivo consigo mientras hace ejercicio al aire libre. También puede utilizar un inhalador de alivio rápido antes del ejercicio para evitar la obstrucción de las vías respiratorias, dice Parkkari.

Sin embargo, la necesidad frecuente de utilizar el inhalador de rescate también puede ser una señal de que el asma no está controlada. Porque cuando el asma está bien controlada no debería haber motivo para evitar ninguna forma de ejercicio. Siempre es una buena idea hablar con su médico de cabecera u otro profesional sanitario si no está seguro de su medicación o tiene síntomas.

Aunque los estudios han demostrado que el asma puede controlarse mejor mediante el ejercicio regular, Parkkari también advierte que puede haber demasiado de algo bueno. "Actualmente estamos realizando un estudio sobre esquiadores profesionales y observamos que la prevalencia del asma aumenta cuanto más se entrena". Sin embargo, para la mayoría de las personas -las que no siguen el régimen de entrenamiento de un atleta profesional de más de 600 horas al año- los beneficios del ejercicio son enormes.

Hacer ejercicio de forma segura con el asma

• Deje pasar más tiempo para calentar cuando haga ejercicios vigorosos.
• La natación es un deporte ideal, ya que es aeróbico y abre los músculos del pecho.
• Añada un paseo en bicicleta a su plan de ejercicios si el dolor de la artrosis en las rodillas y las caderas le da problemas.
• Si el polen es un factor desencadenante, considere la posibilidad de trasladarse al interior en los días de alto recuento de polen.
• La marcha nórdica puede ser una ayuda para los pulmones y la espalda al empezar, gracias a los bastones que sostienen el cuello y los hombros.

Referencias:

Jaakkola, J.J.K., Aalto, S.A.M., Hernberg, S. et al. Regular exercise improves asthma control in adults: A randomized controlled trial. Sci Rep 9, 12088 (2019). https://doi.org/10.1038/s41598-019-48484-8

Dogra, J.L. Kuk, J. Baker, V. Jamnik. Exercise is associated with improved asthma control in adults. European Respiratory Journal Feb 2011, 37 (2) 318-323. https://erj.ersjournals.com/content/37/2/318

Orion invierte en investigación y desarrollo de opciones de tratamiento para personas con asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, a la vez que desarrolla el diseño y la usabilidad de la plataforma de inhaladores Easyhaler^®. Su labor se centra en la seguridad y la calidad en todos los pasos del ciclo de vida del producto, así como en el cuidado del medio ambiente. Todos los aspectos de la sostenibilidad (social, económica y ambiental) se tienen en cuenta meticulosamente en todo el ciclo de vida de los productos. La sostenibilidad está entrelazada en todo el proceso, desde I+D hasta la fabricación, el uso por parte de los pacientes y la eliminación de los inhaladores usados. 

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